¡Ojo que se aprieta la agenda de conciertos interesantes!. A las ya comentadas visitas de The Quireboys, Casablanca, Transatlantic y Camel, hay que sumar a Monster Magnet el jueves 6 de febrero. Al día siguiente, viernes 7, nada menos que los geniales The Aristocrats de Guthrie Govan y Marco Minnemann y el sábado 5 de abril The Crimson Projeckt donde encontramos a Adian Belew, Pat Mastelotto y Tony Levin. Todas las fechas en Madrid.... y los que salgan.

FLYING COLORS   "Live IN Europe"

Album y DVD de este Dream Team del progresivo. Quizá sea el proyecto mas melódico y sofisticado en el que se ha embarcado el prolífico Mike Portnoy, capaz de tocar a todo trapo en Adrenaline Mob o Avenged Sevenfold como de contener el tempo y la precisión en Transatlantic o Flying Colors. El caso es que todo lo hace bien el cabrón.

Pero el virtuosismo de Portnoy es solo un ingrediente mas, al mismo nivel que el del resto de componentes. No vamos a descubrir ahora la finísima técnica de Steve Morse, por ejemplo. Incluso el bajista Dave LaRue se luce en no pocos momentos.

Teniendo un solo álbum en circulación no es de extrañar que lo desmenucen al completo, aderezado y rellenado el show con un puñado de versiones de distintas anteriores bandas de cada miembro más un "Hallelujah" de Leonard Cohen que Casey McPherson canta casi a capella. Neal Morse toma la batuta en los cortes  mas Beatles, caso de "Love Is What I´m Looking For" y por supuesto en la bellísima "June". "Infinite Fire" también recuerda mucho a Spock´s Beard o a Morse en solitario.

El concierto transcurre por muchos pasajes suaves y cadenciosos, incluso las versiones parecen llevar ese propósito, caso de la mencionada "June" , "Can Find A Way" de Endochina, o "Repentance"  (¿el último tema brillante de Dream Theater?). Solo "Odyssey" de Dixie Dregs parece salirse de la norma.

El ambiente que se respira sobre las tablas es simpático y distendido, con diálogos graciosos entre los músicos y alguna de las típicas parrafadas de Portnoy.

El nivel técnico de cada integrante es altísimo, de ahí la pulcra ejecución y perfecta sonorización. Si sonó así en la sala, que gozada, ¿no?. Faltó España en la gira, esperemos que no sea así la próxima vez... si es que la hay.

THE FLYING EYES

Traemos a este blog a una joven banda procedente de Baltimore, Maryland, que han dirigido su punto de mira nada menos que a los felices sesenta, al rock ácido de San Francisco y el blues psicodélico y lisérgico de aquella época. Resulta loable, cuando no esperanzador, que unos chicos tan jóvenes desvíen su mirada y sus influencias musicales a tan pretéritos tiempos, aunque si lo que buscaban era riqueza artística y creatividad han dado en el clavo.

En su primer disco, "Flying Eyes de 2009, suenan mucho a The Doors, sobre todo su vocalista Will Kelly que parece emular a Jim Morrison. En "Done So Wrong" de 2011 se desprenden bastante de esas comparaciones y desarrollan un álbum mas en la línea de Grateful Dead. Su tercer trabajo, "Lowlands" de 2013, es un paso adelante. El grupo endurece su sonido, las guitarras suenan más afiladas y ásperas y las bases rítmicas mas pesadas, en la onda de Blue Cheer, mas setenteros que sesenteros. El background Morrison ha desaparecido casi al completo. Camo¡inan mas parejos a bandas como Radio Moscow o The Muggs o la avalancha sueca (Graveyard, Three Seasons...).

Si tienes nostalgia de aquellos sonidos y te sientes cómodo con el fuzz y el reverb deberías echarles un vistazo. Recientemente estuvieron de gira por estos pagos.

THE GATHERING  "Afterwords" 2013

Se trata de  mi reencuentro con esta banda holandesa desde sus primeros tiempos de "How To Measure A Planet" o el directo "Superheat" allá por 1999. En cierto modo fueron precursores de lo que hoy conocemos como post-rock  y del sonido que luego desarrollaran bandas como Tool, aunque The Gathering inclinarían su balanza mas tarde hacia tendencias mas orientadas a la electrónica.

Y en esa tesitura se encuentran, "Afterwords" es una obra de ambient space rock, con muchas dosis del primer término o de pop, más que de rock. Es el caso del tema "Areas", por ejemplo. En otros, como "Turning In, Fading Out", las melodías pueden llevarte al hipnotismo, cuando no a la somnolencia.

Algunos de los temas ya fueron incluidos en el EP "Afterlights", y "Gemini" es la tercera parte de un tema de su anterior trabajo. Es, creo, su tercer álbum con la vocalista Silje Wergeland. Su voz es dulce y bonita, pero carece del carisma de Anneke Van Giersberger (a quien, por cierto, traeremos dentro de poco por aquí). Un disco para escucahr tranquilamente tras la ventana mientras fuera llueve o nieva.

AYREON  "The Theory Of Everything" 2013

Arjen Lucassen despierta a la bestia Ayreon en otra super-producción con cierta tendencia a lo excesivo. Esta vez el elenco de invitados se abulta mas en lo instrumental que en lo vocal, con firmas tan ilustres como las de Keith Emerson, Rick Wakeman, Steve Hackett o John Wetton. Dichas colaboraciones dicen mucho del pedigrí que ostenta el holandés. El carrusel de vocalistas es menor esta vez, pero destacaría las intervenciones de Cristina Scabbia como lo mas sobresaliente en este aspecto.

Y es que, sí, mucho ilustre en la lista de invitados, pero sus intervenciones a menudo se diluyen entre la enormidad del sonido y el desarrollo de la obra. No destacan.

La ópera rock de temática metafísica se divide en cuatro actos de algo mas de 20 minutos cada uno y se sub dividen a su vez en multitud de pequeños cortes a veces tan cortos que terminan por desconectar al oyente. 

En lo estrictamente musical diría que es el trabajo menos heavy metal de Lucassen con Ayreon, sobre todo las dos primeras suites y que los teclados brillan mas que las guitarras (de ahí la pléyade de teclistas acreditados. Que no se me olvide citar a Jordan Rudess también). "Collision" seguramente sea lo mas hard rockero, mientras la mayoría del tiempo navega mas por el progresivo o el sinfónico clásico, garndilocuente. Tampoco faltan los habituales pasajes celtas.

En definitiva, quizá el trabajo mas ambicioso de Mr. Lucassen pero de digestión pesada. Echo de menos estribillos que podamos retener en nuestro subconsciente y sobra ampulosidad o pomposidad. En cualquier caso una obra muy bien trabajada y producida, una cosa no quita la otra.